Apuntamos a profundizar y cuestionar las concepciones naturalizadas que giran en torno al modo de sentir, pensar y vivir la existencia, tanto en el plano individual como colectivo.
Nos dedicamos a:
realizar lecturas personalizadas a Consultantes de Astrología y Tarot
enseñar estos saberes a quienes quieren aprovecharlos profesionalmente o para sí
divulgar información de calidad en medios propios y ajenos
investigar teoría y praxis de los Lenguajes Simbólicos
En todas las actividades, nuestra modalidad de trabajo apunta a que la adquisición de conocimientos (en instancias educativas, en medios de difusión, en consultoría o en nuestra investigación) funcione como un fermento o enzima cuya presencia estimule una TRANSFORMACIÓN material, psíquica y espiritual.
Consideramos que la Astrología y el Tarot (en instancias tanto de aprendizaje como de consulta) enriquecen los procesos humanos de reflexión personal, autoconocimiento y transformación de la conciencia.
Dicha mutación debería inspirarnos a buscar la realización personal, la felicidad y la alegría de estar en esta vida.
En la experiencia de la humanidad que somos, la espiritualidad es encarnada, o no es. Y si esto es así, implica un sano equilibrio entre nuestras dimensiones mental, emocional y corporal.
(a nivel mental) de la indispensable rigurosidad y pensamiento crítico que deben estar asociados a cualquier conocimiento o saber;
(a nivel emocional) del trabajo profundo y verdadero en el plano psicológico, que nos permiten elaborar las dificultades emocionales de nuestra historia personal y;
(a nivel corporal) del registro de la realidad física concreta, que habilita la franqueza necesaria para no evadir los desafíos de la vida real
Se trata de un conocimiento que lamentablemente, se ha bastardeado y simplificado en el discurso popular moderno (que circula no sólo en los medios sino también en el imaginario social), por lo que apuntamos a romper mitos y prejuicios que circulan acerca de los mismos
Entendemos que el conocimiento se nutre de la experiencia práctica tanto como de la formación teórica constante.
Cuando nos adentramos en el aprendizaje y el uso de los Lenguajes Simbólicos, nos sumergimos también en los procesos de vida de las personas, con todo lo delicado que ello resulta. Ello requiere ofrece tanto a Consultantes como Estudiantes, espacios humanizados de respeto, confianza, amorosidad y confidencialidad a quienes se acercan, tanto en actividades grupales como individuales.
Dado que la propuesta de LDC apunta a la transformación, queremos corrernos de los supuestos habituales desde los que miramos la vida, poder proponer una mirada crítica sobre las ideas, creencias, convenciones sociales y formas de sentir que están instaladas como “sentido común” para considerar otros puntos de vista sobre de qué se trata estar vivos.
En continuidad con el punto anterior, una intención que subyace siempre en nuestra tarea es la búsqueda de sentido como motivación básica del ser humano, que apunta a llegar a ser la mejor versión de nosotros mismos. Esto implica intentar sostener siempre la empatía, la amorosidad y un contacto sincero con lo que es eminentemente humano.